El escaso desarrollo en infraestructuras y servicios del distrito de Limpopo, el bajo nivel de escolaridad así como el cambio climático hacen que la población sea vulnerable a enfermedades y desastres naturales que, de manera cíclica, anulan los esfuerzos realizados para reducir la pobreza y la InSAN. La pobreza se encuentra íntimamente ligada a la desnutrición crónica, principal problema de nutrición en el país, encontrándose Mozambique entre los 10 países del mundo con mayor prevalencia de la misma (43,1% a nivel nacional). Esta situación supone una carga evidente para el potencial de desarrollo del propio país, condicionando su capacidad productiva y de acceso a recursos. Constituye un círculo vicioso: la población está desnutrida por ser pobre y esta propia desnutrición les mantiene en la pobreza.

Este proyecto, financiado por el Ayuntamiento de Málaga y ejecutado por el socio local Asociación para el Desarrollo de las Comunidades Rurales (ADCR), pretende fortalecer la resiliencia de las comunidades de Mabauane y Tlacula. Para ello, la intervención contempla dos resultados diferenciados:

Promover una agricultura de bajos insumos adaptada al cambio climático en cuatro asociaciones y dos escuelas: Esta primera línea de trabajo permitirá aumentar la disponibilidad y acceso a los alimentos, garantizando un incremento de la producción y diversidad de cultivos bajo un modelo productivo adaptado al cambio climático, promoviendo el procesamiento y conservación de los alimentos e incrementando su comercialización localmente. La intervención va a contribuir al empoderamiento colectivo de las mujeres agrupadas en las asociaciones agrícolas, donde son la gran mayoría, gracias al impulso de los procesos productivos en la zona alta y el fortalecimiento organizativo.

Mejorar el acceso al saneamiento con enfoque de género en las dos comunidades: Esta línea de trabajo permitirá que la población tenga una mejor calidad de vida al reducir las enfermedades e infecciones directamente relacionadas con prácticas higiénicas inadecuadas y falta de salubridad en el medio. El trabajo de sensibilización se llevará a cabo a través de las estructuras comunitarias existentes (comités de agua, comités de higiene y saneamiento, y núcleos de higiene y salud escolares), complementando con la promoción y construcción de letrinas mejoradas. El fecalismo a cielo abierto sigue siendo una práctica generalizada en las comunidades que debe ser erradicado a medio plazo para conseguir avances en este sentido.

Entre el 10 y el 17 de julio llegaron las niñas y niños saharauis al Aeropuerto de Málaga dentro del proyecto VACACIONES EN PAZ 2023.

 El proyecto consiste en la acogida temporal de niños y niñas procedentes de los Campamentos de Refugiados Saharauis situado en la Hamada argelina de Tinduf (Sur de Argelia) durante los meses de julio y agosto de 2023. Los objetivos son la mejora de su salud y alimentación fundamentalmente, así como, mejorar el conocimiento del español, que es su segunda lengua, y tener la oportunidad de relacionarse con los niños y niñas malagueños, y conocer otra realidad y otra imagen del mundo distinta de la que les aporta la dura realidad del desierto y de la situación de refugiados en la que viven.

 Este año tenemos en la provincia de Málaga 27 niños y niñas saharauis de los que 5 permanecerán en Málaga ciudad que harán de embajadores de su país, el Sáhara Occidental. El pueblo saharaui se ha visto obligado a vivir desde 1975, tras la invasión y ocupación de su país por Marruecos, en la zona más inhóspita y dura del desierto del Sahara, en los campamentos de Refugiados de Tinduf, Argelia, con más de 50º C de calor durante el verano. Hijos/as de refugiados/as y refugiados ellos mismos, subsisten gracias a la ayuda internacional, en espera del cumplimiento de la Legalidad Internacional que les permita decidir y volver a su tierra.

 Las familias de acogida tendrán la oportunidad única de conocer de primera mano una realidad y cultura diferente y transmitir a sus hijos y al resto de la sociedad una serie de valores basados en la tolerancia, el respeto a los demás, la generosidad y la convivencia en paz. Es también una oportunidad de concienciar a la población malagueña de la problemática y de la causa de este pueblo.

 Desde la AMAPS se hace un seguimiento estrecho de las estancias de las y los menores y se facilita su revisión médica y se organizan actividades como recepciones en los Ayuntamientos y reuniones con otras instituciones que han colaborado en el proyecto donde los medios de comunicación suelen estar presentes. En las fotos arriba la llegada de los niños y niñas, reunión con las familias de acogidas y el acto de recibimiento por parte del Alcalde de Málaga.

 Nuestro agradecimiento a las personas voluntarias de AMAPS, las familias que son las que hacen posible el Programa Vacaciones en Paz 2023, y los Ayuntamientos de Casares, Cuevas Bajas y Málaga que han colaborado con el proyecto.

 Finalmente destacar también que el Ayuntamiento de Málaga, a través del Área de Participación Ciudadana, Inmigración y Cooperación Internacional, ha apoyado en la convocatoria de 2023 el proyecto de Cooperación Humanitaria denominado “Ayuda alimentaria para la población refugiada saharaui en los Campamentos de Tinduf” con una subvención de 8.565,00 Euros.

 ASECOP a realizado un proyecto en Palestina, en la localidad de Rantis, distrito de Ramala y Al Bireh, que tiene como objetivo el fortalecimiento de la capacidad productiva de 40 mujeres a cargo de parcelas agrícolas en la localidad de Rantis, distrito de Ramala y Al Bireh, mediante la capacitación y el apoyo de técnicas agroecológicas en detrimento de la agricultura intensiva convencional, mejorando la relación de los productores locales con el medio ambiente y promoviendo un mejor uso del suelo y los recurso.

ASPA (Asociación Andaluza por la Solidaridad y la Paz) es una ONGD sin ánimo de lucro, que desde Andalucía y desde un compromiso transformador, trabaja desde 1987 en la construcción de un mundo más humano y solidario. En Málaga, concretamente en el barrio de El Molinillo, catalogado como zona desfavorecida, es donde realizamos diferentes acciones sociales para favorecer la participación, convivencia y cohesión social.

Desde hace años, ASPA ha ido realizando talleres y encuentros en este barrio caracterizado por las dificultades sociales y laborales que enfrentan especialmente mujeres desempleadas en situación de vulnerabilidad.

Una de las actividades con mayor éxito es el Taller de Costura. Este taller ofrece una formación en corte, confección y patronaje a personas que se encuentran en situación de vulnerabilidad social, promoviendo su inclusión social y laboral. Han realizado su formación de febrero a junio en grupos con diferentes niveles de aprendizaje, creando un espacio, no solo de costura, también de encuentro y convivencia promoviendo el respeto a la diversidad cultural, la participación vecinal y sociabilidad de la población.

El Taller de Hábitos Saludables, ofrece una visión global de hábitos para la salud integral (física, emocional y mental), fomentando el autocuidado y la responsabilidad sobre él. En este taller participa un grupo de “mujeres saludables”, como se han hecho llamar, que comparten encuentros semanalmente en ASPA, en el Huerto Urbano La Yuca o en zonas verdes de Málaga, para contribuir a su desarrollo integral y mejorar su bienestar personal, social y emocional. Estos espacios de colaboración y ayuda mutua se sostiene con el apoyo de una voluntaria de la entidad.

Para el Taller de digitalización también hemos contando con otro voluntario de ASPA que ha ofrecido diferentes sesiones atendiendo a las necesidades e intereses de los/as vecinos/as del barrio en este ámbito, facilitando el acceso de la población a las nuevas tecnologías y disminuyendo así la brecha digital actual.

Estos talleres han estado enmarcados en la Estrategia Regional Andaluza para la Cohesión e Inclusión Social (ERACIS) durante los años 2020-2022, financiados por el Fondo Social Europeo y la Junta de Andalucía. Tras esta fecha, un buen grupo de personas ha continuado de forma voluntaria viéndose y reuniéndose con el apoyo del grupo de voluntariado de ASPA. Excepto en el Taller de Costura que hemos contado este año por dos ocasiones con la donación económica de ECOEMBES y Reciclos en su línea de compromiso a proyectos sociales y sostenibles, contando previamente con la colaboración de la Concejalía del Área de Servicios Operativos, Régimen Interior, Playas y Fiestas del Ayuntamiento de Málaga.

Los talleres han tenido muy buena acogida y las participantes están muy satisfechas con los encuentros mantenidos, mostrando su agradecimiento e interés en volver a retomar las sesiones después de verano. Por lo que, tras este descanso, en septiembre volveremos a compartir y disfrutar de estos encuentros formativos, saludables y necesarios.